El mercado como institución nace de la organización del comercio local (caso que nos interesa), esto es, de los comerciantes y proovedores que al ser su número considerable y por ende su actividad preponderante para el municipio, se otorga un sitio y moviliario adecuado para su ejercicio ("Mercado" Mercado como edificio).
Así el punto de partida son los locales fijos con que en un principio está dotado el mercado, están previstos para giros determinados, esto es el tipo de mercancía que se vende, misma que puede ser perecedera e imperecedera.
Al frente se encuentra un administrador el cual se encarga principalmente de recaudar el pago por el derecho de piso, esto es: administra las cuotas que genera el uso de cada espacio de venta dentro del mercado. Dependiendo de las dimensiones del municipio puede estar subordinado a un regidor de mercados y a su vez puede tener, dependiendo del tamaño del mercado, varios auxiliares en el cobro de estos impuestos.
Con el tiempo se vienen generando diversos fenómenos dentro del Mercado. El ambulantaje y la llegada de puestos semifijos (cacetas por ejemplo) que rebasan los parámetros del programa original. Esto cuando se otorgan concesiones y permisos para vender de manera indiscriminada, es entonces cuando los diversos espacios libres se atiborran de locales semifijos, siendo un problema por el abasto de los servicios de luz, agua, drenaje, etc. dentro del Mercado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario